El futuro de los móviles
Ante todo queremos disculparnos por el retraso: ¡ha sido una semana muy difícil y llena de comprar en China!
Como por todos es sabido, el comprar en China un móvil barato chino se ha convertido en lo más normal a la hora de cambiar de terminal. La mayoría apuesta por un modelo que se adecúe a su presupuesto, aunque muchos optan por terminales de alta gama que reflejen su estatus social.
Sin embargo, el mercado de los teléfonos ha llegado a un punto donde ya apenas se puede sorprender a los usuarios. Incluso los teléfonos de última generación, como el Galaxy S7 y el iPhone 6S ya apenas sorprenden a nadie. ¿Por qué? Pues para empezar por lo mucho que se parecen a sus predecesores. Los cambios que aportan no son lo suficientemente drásticos ni impresionantes como para justificar la actualización de un terminal ya bastante potente de por sí a estas últimas versiones.
El coste también es un problema. El Samsung Galaxy S7 tiene un precio inicial de 719 euros y su rival de Apple parte de los 750. Muchos se preguntan si merece la pena pagar esas cantidades por terminales con potencia muy diferente a la de los que se pueden comprar en China.
Porque el siguiente problema para los grandes fabricantes es ese mismo: los consumidores han acabado por entender que pueden comprar en China muy buenos móviles con las últimas tecnologías por un precio mucho mejor.
Como ya anunciábamos hace poco, el Mobile World Congress de Barcelona había servido de placa de Petri para la germinación de las próximas tendencias de mercado, y el mensaje que ha emitido ha tenido una interpretación unánima: el futuro mira a comprar en China. Atlas Overseas trabaja duramente para traer los últimos modelos a España. Las empresas que nos hacen encargos de una gran cantidad de terminales encuentran que trabajamos con fabricantes de primer nivel a la vez que con toda clase de productores que se ajusten a las necesidades de nuestros clientes.
Las firmas chinas han entendido que la mayoría de usuarios sólo busca un terminal con la suficiente potencia como para mantenerse al día sin que ello conlleve un gran desembolso. Esto se traduce en que la mayoría de los móviles de superlativa potencia que se pueden comprar en China tienen un precio que oscila entre los 200 y los 400 euros.
No obstante, no todos los usuarios de teléfono quieren terminales de última generación. En Atlas Overseas sabemos que la verdadera base de usuarios está en el público que busca móviles chinos baratos, no particularmente prohibitivos pero con potencia y calidad suficientes para sobrevivir en el mundo digital. Coolpad y ZTE mostraron teléfonos de gama medio-alta que oscilaban entre los 159 y los 200 euros. Del mismo modo, Oppo se ha sumado al carro de la innovación y en lugar de presentar un terminal mostró una nueva tecnología que permiten cargar completamente nuestros teléfonos en 15 minutos.
Queda por ver la respuesta de los grandes fabricantes a esta nueva tendencia del mercado, pero la opción más fácil sería hacer como nosotros e innovar en todo lo posible. LG ha entrado al mercado con un móvil modular y Samsung parece apostarlo todo a la realidad virtual.
Nosotros en la oficina usamos nuestros móviles (obviamente, producto de comprar en China) para leer vuestros tuits en @atlas_overseas.