Comprar en China sin riesgos con la ayuda de Atlas Overseas
A pesar de todos los blogs que leemos sobre comprar en China, los acuerdos multinacionales del país asiático con el resto del mundo, la apertura comercial exponencial y los puertos tax free de China, lo cierto es que cuando nos ponemos a ello, nos encontramos en muchas ocasiones igual que hace 20 años. Es decir, comprar en China sin riesgos sigue siendo complicado.
Cierto es que existen empresas e-commerce como Alibaba, Taobao, Aliexpress, Dhgate y otras similares que son perfectas para comprar móviles en China, tablets, otros gadgets o ropa. La compra en China la suele realizar un particular para su uso y tampoco es un drama si el producto no llega o resulta ser un timo o algo distinto a lo que esperábamos. Nos llevamos una decepción, perdemos unos cuantos euros y comenzamos un proceso tedioso y largo para conseguir que nos devuelvan el dinero o que nos envíen aquello por lo que creemos que hemos pagado.
Para Atlas Overseas, el problema viene cuando somos una empresa y lo que queremos comprar en China sin riesgos son componentes para un producto que vamos a fabricar, o bien abaratar costes de un producto similar al que distribuimos a nuestros clientes. Las compras chinas en estos casos son de volumen, caras y sobre todo imprescindibles para nuestro negocio.
¿Cómo podemos entonces comprar en China sin riesgos o minimizarlos?
El servicio que ofrecemos desde Atlas Overseas comienza en la búsqueda de la fábrica en China más idónea para el cliente en cuestión. Incluso en la comprobación de aquellas fábricas en China que nuestros clientes han encontrado en Internet, de modo que confirmemos que tienen los certificados, que son reales, etc.
Muchas veces, se nos olvida que China está a más de 10.000km, y que ambas partes tienen que entenderse en un idioma que no es el suyo. Además, hay limitaciones en cuanto a la importación de determinados productos según el país que, en algunas ocasiones, ni siquiera la fábrica en China lo sabe.
Para nosotros es crítico y esencial saber que la fábrica china con la que tratamos es de confianza, existe, exporta y puede ofrecernos lo que necesitamos. A partir de aquí, si tenemos algún problema en la importación podrán ayudarnos; si no, se desentenderán y entonces empezará un proceso donde habitualmente y por desgracia, el comprador tiene una impotencia legal que hace que desista de recuperar su inversión.
En próximos posts os explicamos cómo elegir la fábrica en China de manera correcta, cómo realizar inspecciones a fábricas y cómo podemos optimizar de compra.