La crisis de los contenedores II
Siguiendo con la temática de la crisis de los contenedores II; https://atlas-overseas.com/la-crisis-de-los-contenedores/ , nuestro interés se centra en analizar la situación que están viviendo en los puertos españoles y asiáticos.
Recordamos , tal y como mencionábamos en posts anteriores; https://atlas-overseas.com/precios-del-transporte-maritimo/ y https://atlas-overseas.com/subida-del-243-del-transporte-maritimo/ que se esta dando un significativo encarecimiento del precio de los transportes marítimos.
Lo que supone, a la vez, un obstáculo para la transacción de importaciones y exportaciones de productos fabricados en China .
¿Cuál es la situación en los puertos españoles?
El Puerto de Valencia es uno de los más grandes e importante en volumen de importaciones y exportaciones de España, concretamente es donde se localiza el mayor centro de almacenaje de contenedores.
Tomando como referencia a Valencia, según Container rised Freight Index (VCFI) el indicador que mide la tendencia y evolución de costes del transporte de contenedores por mar desde el Puerto de Valencia, detalla que, a pesar de todos los baches, se ve el tráfico de estas zonas más fluido que hace unos meses, y en ciertas zonas se vislumbran datos similares a los del inicio de la pandemia.
No obstante, se calcula que el precio de los fletes sigue en alza, entorno a un 1,26% adicional.
¿Cómo afecta a los consumidores?
Esta compleja situación afecta a todos los miembros de la cadena:
Por una parte, las empresas exportadoras, por ejemplo, las chinas; https://atlas-overseas.com/comprar-en-china-las-mayores-exportaciones-ix/ , ven reducida su producción.
Así mismo, las compañías navieras, ven reducidos sus beneficios por bajo espacio en los contenedores; https://atlas-overseas.com/colapso-en-el-canal-de-suez/
Y por último los consumidores, ven encarecidos los productos y del mismo modo los costes de envío.
Por suerte, desde la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) han garantizado que los precios de los fletes se normalizarán en la segunda mitad de 2022, cuando se ralentice la demanda internacional y se normalice el tráfico marítimo, aunque esto habrá que comprobarlo llegado el momento.