Trump y China: el gigante asiático sigue ganando
Como hemos comentado en nuestro blog anteriormente, durante la campaña para llegar a la presidencia de los Estados Unidos, Trump y China se enfrentaron. El presidente americano arremetió contra China durante su campaña, asegurando que estaba “violando” a EE.UU.. Entre otras acusaciones, la calificó oficialmente de manipuladora de divisas en su primer día en el cargo. No obstante, tuvo que retractarse en su primer acercamiento a Beijing.
Han pasado unos meses desde su elección como presidente, y Trump ya dejó caer la posibilidad de mejorar las relaciones con Taiwán. Durante este periodo de tiempo y, demostrando una vez más la fuerza del gigante asiático, Xi congeló todos los contactos entre Beijing y Washington en todas las áreas para que Trump diese marcha atrás en su idea. ¿Y qué es exactamente lo que ocurrió? Como muestra de buena voluntad, semanas más tarde el gobierno chino garantizó a Estados Unidos derechos de patente en China, con una velocidad y a una escala que sorprendieron a la comunidad internacional.
Las relaciones de la Administración Trump con la comunidad internacional es un regalo para China
Un claro ejemplo de la relación entre Trump y China es la reducción del 28% en el gasto de diplomacia con fines de ayuda al extranjero y organizaciones internacionales por parte del país norteamericano. Mientras tanto, China ha triplicado el presupuesto de su Ministerio de Exteriores durante la última década, sin incluir su gasto masivo en ayuda y desarrollo para Asia y África.
Otro ejemplo es la decisión de la Administración Trump de recortar los fondos estadounidenses para Naciones Unidas, propuesta otra vez que le permite a China tener influencia en el organismo global que ha incrementado su financiación para la ONU y está en negociaciones para cubrir el déficit a medida que EEUU se retira. Así, China se ha convertido en el segundo financiador de las operaciones de mantenimiento de la paz de la ONU y tiene más Cascos Azules que los otros cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad juntos. Esto le permite a Xi Jinping lograr más influencia, desde nombramientos clave hasta cambios en ciertas políticas en el seno del sistema de la ONU.
Medidas de Trump y China respecto al mercado internacional
La primera decisión de la Administración Trump fue retirar a Estados Unidos del Acuerdo Transpacífico (TPP), lo que le permite a China en palabras del primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, la posibilidad de unirse al TPP, básicamente convirtiendo un grupo concebido como disuasión contra China en un brazo más de su influencia.
En materia de ciencia, educación y cultura, Estados Unidos siempre ha estado en primera línea. Sin embargo, en la propuesta presupuestaria de Trump, los Institutos nacionales de Salud, la NASA y los laboratorios nacionales se enfrentan a drásticos recortes, y otra vez Beijing, mientras tanto, ha seguido expandiendo sus “Institutos Confucio” a lo largo del mundo. Ahora China ofrece 20.000 becas para que estudiantes extranjeros vayan a su país y su financiación para grandes proyectos de ciencia crece cada año. Por ejemplo, el mayor telescopio del mundo está en China, no en EEUU.
La Administración Trump quiere un ejército mayor mientras que Beijing se concentra en la economía, la tecnología y el ‘soft power’. Comprar en China cada vez será más fácil y se demuestra otra vez más con estas políticas proteccionistas. Gracias a Trump y China, parece que se desequilibra la balanza entre países y comercio exterior, y desde Atlas Overseas estaremos expectantes al nuevo orden global que se está formando para adaptarnos a él y ofrecer los mejores servicios a nuestros clientes.