Comprar en China

El lema de Atlas Overseas es: si otros pueden hacerlo, ¿por qué yo no? El Gigante Asiático es la fábrica del mundo, por tanto, nuestro objetivo al comprar en China debe limitarse a encontrar al proveedor que produzca más barato respetando la máxima calidad del producto.

Nuestro proveedor en China va a ser nuestro partner comercial, por ello, no debemos mostrarnos recelosos con nuestra idea original, de hecho, el objetivo de comprar en China es hacer copias en masa de nuestro producto. Firmaremos un contrato de confidencialidad e intentaremos proteger nuestro know-how, pero cuanta más información demos sobre nuestra idea de negocio, más posibilidades de éxito tendremos en la fabricación en China.

En Atlas aconsejamos buscar dos o tres proveedores en China que ofrezcan el mismo producto o proceso y al final elegir el más económico. Si no encontramos exactamente el producto que buscamos, podemos quedarnos con lo que ellos ofrecen si nos acopla, haciendo pequeños cambios. En cualquier caso, deberemos poner en práctica nuestro objetivo de compra paciente.

En Atlas Overseas estimamos que el proceso de comprar en China suele durar unos 6 meses desde que hablamos con nuestro cliente hasta que enviamos el primer pedido en China.

En este tiempo definiremos nuestras necesidades, revisaremos cotizaciones y especificaciones, solicitaremos y recibiremos muestras, haremos la homologación en España, organizaremos la fabricación de un pedido más grande, definiremos el embalaje e imprimiremos nuestra marca en el producto.

Pasados estos 6 meses, el plazo habitual para pedidos posteriores suele ser de 20 días para fabricar independientemente de la cantidad, 30 días para el envío marítimo o 10 días para el envío aéreo.

Para introducir nuestra compra en China en la Unión Europea, algunos artículos necesitarán documentación especial, como el certificado CE, el FCC o el RoHS. En muchas ocasiones hay que enviar un prototipo o un manual del producto a organismos públicos para conseguir una licencia y evitar problemas o costes añadidos en las aduanas por dejar los productos allí almacenados.

La fábrica en China no se hará responsable de las demoras, multas o la destrucción del producto. Por ello, para comprar en China contrataremos a una empresa especializada en España para fabricar en China con total tranquilidad, o bien oficinas económicas regionales, que resultan más caras pero pueden ayudarnos durante el tiempo que tardemos en encontrar a un agente en China de confianza.

El sistema de importación dropshipping es un tipo de venta al por menor en China donde el minorista no almacena los bienes en su inventario sino que pasa el pedido del cliente y los detalles de envío al mayorista, que es la empresa que despacha las mercancías directamente al cliente.

Como minoristas obtendremos nuestro beneficio en la diferencia de precios entre ambos: al ser el propio mayorista el encargado de la logística nos ahorramos el tener que disponer de espacio y personal para manejar el producto. Disponemos del stock del mayorista, y como dropshipper solo deberemos preocuparnos del proceso logístico y de elegir al proveedor más barato para comprar en China.

Si las empresas chinas no aceptan negociar en dólares americanos, es porque no tienen Licencia de Exportación, por lo que es conveniente contar con la ayuda de un agente de exportación para evitar problemas posteriores.